El sodio es un elemento esencial para la salud humana ya que desempeña un papel vital en nuestra bioquímica, manteniendo el equilibrio de fluidos a nivel intracelular. También tiene importantes funciones en nuestro sistema nervioso.
El sodio está presente naturalmente en la mayoría de los alimentos, pero muchos alimentos procesados contienen sodio añadido en sus recetas y formulaciones.
La razón por la que añadimos sodio a los alimentos es principalmente para su conservación (disminución de la actividad de agua) y la mejora de las características organolépticas entre otros.
No obstante, un aporte excesivo de sodio a través de nuestra dieta puede resultar perjudicial para la salud ya que puede conducir a hipertensión arterial, acumulación de líquidos nocivos que afectan al corazón, hígado y riñones. Es por ello, que el sodio es uno de los elementos que debe reflejarse en el etiquetado nutricional de los alimentos, según la legislación europea vigente Reglamento (UE) Nº 1169/2011.
Desde las autoridades en materia de seguridad alimentaria y nutrición también se están llevando a cabo diversas iniciativas a raíz del Plan de Reducción del consumo de sal para adecuarse a las recomendaciones de la OMS que establece la ingesta máxima en 5g de sal/día. Dichas iniciativas van desde la concienciación social, hasta la reformulación de alimentos en colaboración con la industria alimentaria.
Es por ello, que resulta esencial contar con métodos que nos permitan la determinación de Sodio o Sal (NaCL) en productos alimenticios y entre estos métodos tenemos los electrodos de ión selectivo para Sodio.
o las Valoraciones Argentométricas de Cloruros.
Cada técnica analítica, cuenta con características, rangos y mantenimientos diferentes, lo cual, los hace más o menos adecuados para la aplicación.
Para más información, póngase en contacto con nosotros escribiéndonos a info@hanna.es.
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